domingo, 16 de septiembre de 2012

El canto Ali Primerista versus el Capital.



“Es verdad que la palabra 
cual martillo se levanta 
y hasta dicen que una sola 
puede acabar con murallas 

Pero hoy nos dice la historia 
que sin acción no se avanza 
pero hoy nos dice la historia 
que sin acción no se avanza 

"con el martillo dando" 
y no dejarse dar 
"con el martillo dando compañero" 
y hacernos respetar” Ali Primera (canción con el martillo dando)

Entristece a veces ver posturas, llena de coraje a veces ver caras duras, pero más arrechera da ver los herederos del padre cantor arrodillados ante el mercado. Siempre se ha debatido acerca del canto, si es necesario, si es urgente, si es combativo, si es revolucionario, si es la nueva canción; pero creo eternamente en que el canto es una cultura que nos hace más sensibles ante la vida, pero es inversamente proporcional cuando no se tiene principios, cuando no se tiene ética y más todavía, cuando no se tiene conciencia. ¿Qué sería del canto revolucionario sino fuera consciente?, pues simplemente no sería revolucionario, no sería ni siquiera canción, sería un ruido como el de las sirenas que llevan moribundos al hospital, como el de las fieras que persiguen a la presa. Así busca el burgués cantante el dinero, persigue su presa sin importar que se lleva por delante, en  este preciso caso, se llevan la moral, la herencia, la conciencia colectiva, la escupen, por sólo estar detrás de su presa: el capital.

A los que luchan les sigue contando Canelón, ese mismo del canto Ali primerista, ese mismo canto hoy escupido por los “herederos”, que se montan en la tarima que representa la vorágine, el exterminio: el capitalismo. Sin haber inseminado a nuestras madres, eres mi Padre Alí, aunque indignos de tu apellido “canten y bailen” al burgués explotador, aunque ellos nunca comprendan tu legado, los que hoy nos sentimos germinados en tu canto siembra, seguimos cantando a la vida, al amor y al odio proletario, precisamente esa última parte no se nos olvida, porque si se nos olvidara, pues el viejo Canelón no lo perdonaría. Cosechar millones, pero de sonrisas, de conciencias, eso fue lo que tu lirica nos enseñó,  cuatro afinado, violín en el fondo, y ese vozarrón, no se olvida, y no se maltrata con esteticismos burgueses del mercado, porque de una cosa si estamos claros, tu nunca vendiste tu canto, porque sabías que si lo vendías te vendías, si lo vendías nos vendías, para fraseando una de tus canciones (canción para recordarme).

Porque como tú, como Víctor Jara, como tantos cantores, se hicieron los arquitectos de nuestro futuro, que hoy es el ahora, que prepara las condiciones para un mañana mejor,  el despertar de las conciencias, de los sueños, de la vida. Aprendimos Alí, que los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos, pero también, no enseñaste, a echar la palabra contra quién sea de una vez,  así sepamos que rompe nubes, “es mejor perder el habla, que temer hablar”.

"Quien sea sensible 
que lance la primera conciencia". Alí Primera.

Por: Ricardo León,
Coordinador ARN Digital
Colectivo Puño Alzao
Comisionado de Cultura JPSUV-Portuguesa.

2 comentarios:

  1. Canción para la acción! Ali Primera sintetizo en su canto el arte de combatir, de luchar, de accionar, sin caer en romanticismos que desvían el camino, sino de entendernos como individuos explotados, como sociedad divida en clases. Siempre Ali! Ejemplo para los cantores de nuestros días, y de bolas da arrechera que parte de su herencia no haya seguido su ejemplo... Ali Vive!

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